CapÃtulo 265Â
César dejó que ella lo agarrara.Â
-¿No me estás mintiendo?Â
Ella le respondió sin pensarlo dos veces:Â
-No.Â
-¿Quieres ir a una subasta?Â
Celia lo miró confundida.Â
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Al final, ella aceptó. Después de tantos dÃas encerrada en el apartamento, estaba al borde de la locura. Al anochecer, César la llevó a la casa de subastas. Nicole fue a la audiencia, mientras él la condujo a los asientos VIP.Â
En las subastas, las figuras importantes no aparecerÃan en la sala principal. Los palcos VIP eran suites privadas. Estaban equipadas con pantallas con imágenes sincronizadas de las que habÃa el palco con claridad.Â
-Señor, ¿está acompañado de su esposa hoy?Â
Por coincidencia, César y Celia se encontraron con Jorge y su esposa en el pasillo del segundo piso:Â
Él asintió, sonriendo.Â
-Qué coincidencia.Â
La señora Ruiz posó su mirada en Celia, quien tomaba del brazo a César. No solo era hermosa, sino que también poseÃa una elegancia natural. Al notar la mirada, Celia también le hizo un gesto con cortesÃa.Â
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2:50 PM Sat 18 OctÂ
Capitude 205Â
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En ese momento, entre un grupo de magnates cerca del ascensor, ella reconoció a una figura familiar: era Nicolás. Ella se sorprendió mucho. Era la primera vez que lo veÃa con traje, que estaba impecable y ajustado. Los magnates se congregaban a su alrededor, riendo yÂ
conversando.Â
Al mismo tiempo, Nicolás también miró hacia su dirección. Al darse cuenta de eso, César no pudo evitar entrecerrar los ojos. Él echó un vistazo a Celia, pero desvió la mirada. Tras decir algo a los demás, se acercó.Â
—Señor Gómez, ¿también ha venido por la subasta? -preguntó Jorge, muy sorprendido.Â
Como se sabÃa, el hijo mayor de la familia Gómez nunca habÃa mostrado interés en esosÂ
eventos.Â
-Solo por curiosidad -respondió Nicolás, con su mirada deslizándose sobre Celia antes de enfrentar a César―: Señor Herrera, ha estado tanto tiempo en Rivale, pero que aún no heÂ
tenido el tiempo de visitarlo. Lo siento mucho.Â
César sonrió levemente.Â
-Entiendo que tiene una agenda ocupada.Â
Luego, Nicolás miró a Celia.Â
-Directora Sánchez, ¿ya no planeas regresar a trabajar?Â
Ella bajó la mirada, evasiva.Â
-Regresaré cuando me recupere.Â
-¿No se encuentra bien? -preguntó la señora Ruiz.Â
Celia forzó una sonrisa y lo afirmó con la cabeza. Nicolás retiró su mirada.Â
-¿Malestar real o hay otras razones?-preguntó él.Â
Los Ruiz se miraron, percibiendo la tensión entre los tres. Jorge inventó una excusa y se alejó con su esposa.Â
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Capitulo 265Â
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-Señor Gómez, parece muy preocupado por mi esposa. -César soltó una risa, con vozÂ
llena de hostilidad.Â
Celia lo observó. En el pasado, solo habÃa conocido su lado reservado y distante. No obstante, tras estos dÃas, descubrió el lado loco de César. ¿El divorcio habÃa transformado su personalidad? ¿O esta era su verdadera naturaleza?Â
Nicolás se sintió incómodo por esa hostilidad y le respondió con voz gélida:Â
-Dada su relación con mi abuelo, debo prestarle más atención.Â
-Que su abuelo esté tranquilo. -César rodeó la cintura de Celia-. Yo puedo cuidar bien deÂ
mi esposa.Â
Cuando iba a decir algo más, Celia intervino para evitar conflictos.Â
-Doctor Gómez, la subasta está por comenzar. Debo entrar con… César.Â
Al oÃrla llamarlo asÃ, una sensación peculiar surgió en el interior de él.Â
-Claro, les dejo el espacio. -Nicolás asintió, pasando junto a ellos hacia los palcos.Â
Al entrar en la suite, antes de que pudiera reaccionar, César la tomó de la muñeca y la atrajo contra su pecho. Su mano se posó en su nuca, inclinándose hasta que sus labios y naricesÂ
estuvieron a centÃmetros.Â
-¿Quién te enseñó a llamarme asÃ? -murmuró a sus oÃdos.Â
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2:50 PM Sat 18 OctÂ
Capitulo 256Â
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