Capítulo 179
Cuando César regresó a Villa Serenidad, ya era pasadas las once y media de la noche. Al entrar, la sala y las habitaciones estaban todas a oscuras.
Encendió una luz y abrió la puerta del dormitorio. Bajo la luz del exterior, miró a la persona que dormía en la cama. Por un instante, su expresión se tensó.
Permaneció de pie junto a la cama por un buen rato, luego se quitó el saco y fue a bañarse a la habitación de invitados. 2
***
Al día siguiente, por la mañana, un rayo de luz se filtró por la rendija de las cortinas, cayendo sobre la cabecera. Celia abrió los ojos. Lo primero que vio ella fue la cara apuesta de César.
Su brazo descansaba sobre su cadera, evitando cualquier presión contra su vientre. Este movimiento tan cuidadoso parecía demostrar su intención de tratarla con cariño y delicadeza, formando una escena idílica, como si fueran una pareja inseparable.
Lástima que la brecha entre ellos ya era demasiado profunda, como el fondo del mar… Y ella ya no quería intentar de nuevo adentrarse en su mundo.
Ella volvió en sí y apartó su mano de su cuerpo, pero ese movimiento lo despertó. Él la miró fijamente.
-Tú dormiste bien.
-Claro. Me da sueño a mi hora, ya es costumbre -Celia se mostró impasible.
Antes dormía mal porque solía esperarlo hasta la madrugada. Cuando el sueño la vencía, se dormía en el sofá. En ese entonces, era bastante obsesiva. Pero, como se sabe, ser obsesiva nunca ha traído nada bueno.
Esperaba que él dijera algo más, pero ella no oyó nada más que una risita alegre.
-Con el embarazo, es normal tener más sueño.
¿Embarazo? Celia quedó pasmada.
-¿Qué…? ¿A qué te refieres?
-¿No tienes idea de qué compraste en la farmacia? ¿Necesito recordártelo? -César se incorporó y comenzó a
vestirse.
Ella también se levantó. Mirando cómo la figura se dirigía al vestidor, le preguntó en voz alta:
-¿Fuiste a la farmacia ese día?
Entonces, ¿su sospecha ya había empezado desde entonces? Si ella llevaba a su hijo en su vientre, lo obligaría a abortar, ¿no? Después de todo, ya tenía un hijo, ¿cómo iba a aceptar al otro con ella?
César se abrochaba los botones de la camisa en la entrada del vestidor.
-Si yo no lo menciono, ¿hasta cuándo pensabas ocultármelo?
1/2
Capitulo 179
+25 BONUS
Celia palideció. ¿Iba a reprocharla? Lástima que no estaba embarazada.
De repente, César se paró junto a la cama. Con los dedos sujetándole la mandíbula. La forzó a alzar la vista para
mirarlo.
-Como estás embarazada, quédate en casa y cuida tu embarazo. A la abuela le alegrará saberlo.
Celia se quedó atónita.
-¿Quieres que… cuide mi embarazo?
El entrecerró los ojos, algo confundido.
-¿O qué crees?
Celia apretó los labios, guardando silencio. Con razón su actitud había cambiado drásticamente. Creía que estaba embarazada. Claro, sin mencionar a la abuela, hasta Marta ansiaba mucho tener un nieto. Si se enteraban de su ” embarazo“… ¿impedirían su divorcio con César?
En ese momento, lo único que le preocupaba era si el divorcio procedería sin problemas. Pero, para César, sentía que en su mente estaba tramando algo poco realista.
-Pediré al director que te ajuste el horario durante este tiempo. Además de Margarita, contrataré a sirvientes adicionales para cuidarte.
-No estoy embarazada… -Celia dijo.
La expresión del hombre se ensombreció. Obviamente, creía que estaba inventando excusas… Ella hizo una pausa y cambió de táctica.
-Quiero tener algo que hacer. No quiero estar siempre encerrada en casa.
-¿No quieres estar encerrada en casa? O… -preguntó él, con la punta de los dedos rozando su labial-. ¿Te preocupas por Ben? O, quizás, ¿por Alfredo?
Ella apretó los dientes, conteniendo su impaciencia.
-No tiene nada que ver con ellos.
-Mejor que no.
César la soltó. Sin decir nada más, salió de la habitación. Ella dejó de preocuparse por sus palabras. Al regresar al hospital, le notificaron que sus dos cirugías, una de la mañana y la otra de la tarde, serían cubiertas por cirujanos transferidos de otros hospitales.
Ella revisó la notificación en el grupo de chat del trabajo, y no pudo evitar sentir que todo eso era tan ridículo. En ese momento, Marta le envió un mensaje: toda la familia Herrera ya se enteró de su “embarazo“…