Thirst 26

C26-LO MÁS IMPORTANTE DE SU VIDA. 

C26-LO MÁS IMPORTANTE DE SU VIDA. 

Desde el interior de la oficina, Sienna observaba la escena desde la ventana de cristal. Al principio no entendía lo que estaba viendo y se quedó inmóvil, tratando de procesarlo, pero en cuanto los brazos de Grayson rodearon al niño y sus dedos se deslizaron por ese cabello rubio con tanta suavidad, su cuerpo reaccionó. Sus manos se apretaron contra el vidrio y una punzada aguda de celos le 

subió por el pecho. 

Algo no cuadraba, y su sexto sentido ese que rara vez se equivocaba- le decía que ese niño no había mentido. 

<<¿Es posible que Grayson tenga un hijo y me lo haya ocultado?» pensó, con el estómago revuelto. «No. No, eso no. Yo no pienso criar mocosos de otra. Los niños son molestos, ruidosos, malcriados. Ocupan espacio. Exigen atención. Y lo peor… es que te hacen 

invisible.»> 2 

Afuera, Grayson separó con delicadeza al niño, bajó la mirada hacia él y forzó una sonrisa. 1 

-Vaya, no me esperaba ese abrazo… pero gracias. Ahora dime, ¿estás perdido o tu papá trabaja para mí? 

Oliver lo miró, pero no respondió enseguida. Había algo en su expresión que no podía ocultar. Estaba procesando todo lo que había visto, todo lo que sentía, y aunque quería decirle la verdad, aunque había venido con la intención de hacerlo, algo dentro de él se rompió cuando vio a esa mujer aferrada al brazo de su papá. 

Tragó saliva, mirando al suelo un segundo antes de preguntar en voz baja: 

-La mujer de hace un momento… ¿es su novia, señor? 

Grayson alzó una ceja, confundido por la pregunta, y supuso que el niño lo decía por el incidente. 

-Sí, pero no te preocupes, nada de lo que dijo lo dijo en serio. 

Esa frase fue una bofetada. Porque el nudo dentro de Oliver se apretó todavía más. La respuesta era aún peor de lo que había imaginado. Esa mujer desagradable, era su novia. Y entonces entendió lo que decía su madre, su papá la había elegido a ella en 

lugar de su mamá, en lugar de él. 

Apretó los labios, los ojos fijos en el suelo. 

-¿Usted… alguna vez ha sido papá? -soltó, con la voz un poco temblorosa. 

Grayson se quedó en blanco. La pregunta lo sacó por completo del eje, a decir verdad nunca se lo había planteado, ni lo había considerado. Era una posibilidad que simplemente no existía en su mundo. 

-No. ¿Por qué lo preguntas? 

Oliver lo miró finalmente a los ojos y su voz salió baja, pero firme. 

-Porque creo que debería serlo. 

1 

Y en ese instante, hubo algo en el tono del niño, en la tristeza de su cara y en la vulnerabilidad escondida en esa frase, que le heló la sangre y Grayson no pudo explicarlo. 

-Vine aquí porque quería conocer a mi papá… —confesó Oliver-. Mamá dijo que… que nos abandonó, pero yo quería verlo. 

La ira subió en Grayson como un golpe desde las entrañas, apretó la mandíbula, sintiendo un rechazo violento hacia ese hombre 

que estaba del que hablaba el niño. Quien fuera que lo hubiera dejado así, tan solo, tan confundido, no merecía nada. Y sin saber condenándose a sí mismo, respondió: 

-Entonces deberías olvidarte de ese papá y proteger a tu mamá, porque ese hombre… no vale la pena. 

2 

La herida que se abrió en el pecho de Oliver fue más profunda de lo que Grayson jamás imaginaría, tanto que los labios del chiquillo temblaron y dio un paso atrás, intentando no romperse frente a él. 

Ya no quería estar ahí. No quería escuchar más. Solo quería volver a casa y dio media vuelta sin mirarlo buscando el ascensor. 

Grayson lo vio alejarse y sintió un deja vu tan fuerte que tuvo que dar un paso hacia adelante. La forma en que se alejaba, los hombros tensos, la cabeza baja, era demasiado parecida a él mismo. 

-Espera. ¿A dónde vas? 

Oliver se detuvo, pero no se giró. 

-A casa —dijo, con la voz quebrada-. Usted tiene razón, señor. Debo olvidarme de mi papá. 2 

La opresión en el pecho de Grayson se hizo insoportable y avanzó rápido, lo giró y lo atrajo hacia sí con fuerza, abrazándolo y acariciando su cabello rubio, suave a su tacto. Oliver cerró los ojos y se obligó a no llorar, pero en silencio quería que ese momento 

durara un poco más. 

-Supongo que viniste en taxi. Y que tu mamá no sabe que estás aquí… ¿verdad? 

Oliver negó con la cabeza, Grayson soltó el aire, largo, sintiendo que algo en su interior había cambiado sin permiso. 

– 

-Le pediré a uno de mis choferes que te lleve a casa dijo, sin saber… que ese niño acababa de convertirse en lo más importante 

de su vida. 

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